Es una certeza que no se puede generalizar sobre una situación. Pero observo que cada día aumenta en España las cifras de trabajadores y trabajadoras muy descontento, desmotivados, y aburridos con su actividad laboral.
No se trata de una declaración de amor, ni de las políticas feministas, se trata de una anomalía, se trata visión empresarial que va implicando varias esferas, en la economía de un país, en las cifras de baja laboral por estrés o las relacionadas al deterioro de la salud de las personas trabajadoras.
Y ¿Dónde queda el papel de la dirección de los recursos humanos como herramienta positiva para el bienestar de todo el equipo de trabajo de una empresa? . Y aún mas ¿Cómo se puede medir el impacto productivo sin las personas trabajadoras? No se trata de fichas, de un objeto se trata de seres humanos, que contribuyen cada día con su labor a fabricar una marca, a dar un servicio, a generar riqueza cuantitativa y cualitativa a unos socios empresarios, a una region o a un país. No se trata solo de dinero, es mas allá de la producción de bienes y servicios y el valor que eso conlleva, asi como sus consecuencias , asi como de los retos para el futuro.
No puede convertirse en un garante inquisidor, en plan fábrica de medidas disciplinarias ficticias o falsas. Porque en el fondo lo que está manifestando o demostrando es su inoperancia ante las dificultades o los conflictos, dando una respuesta poco eficiente. Lamentablemente es algo que viene en aumento y que se ha normalizado en la clase trabajadora en España.
Ahora según las medidas políticas del gobierno de turno están intentando cambiar las 40 horas de trabajo semanal, este año se va a reducir hasta las 38,5 horas y, en el 2025, hasta las 37,5 horas. Y, supuestamente esta reducción se va a producir sin recorte salarial (se seguirá cobrando lo mismo). Pero vamos a ver, realmente esta medida impacta de forma inmediata a las personas trabajadoras, en que sentido?
Lo que se va a generar es que la intensidad de trabajo sea más, pero no mejor, y no da garantía de que eso mejore la calidad de vida, y que beneficie económicamente. Ya que los precios del alquiler de la vivienda, la comida, los servicios han aumentado. Asi como los impuestos, como por ejemplo del agua y de la luz.
Entonces ¿nos están engañando? o seguimos viendo el futbol y las olimpiadas para seguir como mansas ovejas.
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